DELFT
Pequeña y pintoresca, la histórica ciudad de Delft se sitúa entre Róterdam y La Haya, en la ribera del río Schie, sus callejuelas y monumentos hacen que sea uno de los destinos turísticos favoritos de Holanda.
A tan sólo 15 km de La Haya se encuentra Delft, una bonita ciudad medieval con más de 750 años famosa por sus artículos de cerámica azul, así como también por el famoso pintor Vermeer y por su vinculación con la casa real de Orange. Revive su glorioso pasado mientras paseas a lo largo de sus canales, iglesias, mansiones y patios. Esta ciudad universitaria también ofrece museos, mercados, numerosos bares musicales y visitas guiadas por los canales.
Delft es una versión más reducida de Ámsterdam. Decenas de atracciones y museos se encuentran a escasa distancia unos de otros. Con la visita a pie podrás ver los mejores lugares de la ciudad en un mismo día.
Delft: la capital holandesa de la cerámica azul
Delft tiene un tamaño ideal para ser recorrida a pie. De hecho, es la ciudad para visitar a pie más popular de Holanda. Está surcada por numerosos canales, haciendo que en la visita debamos recurrir a otros medios de transporte como por ejemplo el canalhopper, un barco que recorre los principales puntos de interés turístico por una tarifa diaria (5 euros el día).
En tierra se puede recurrir a curiosos medios de transporte como un moderno patinete, una tranvía de tracción de caballos que lleva a los turistas a dar un paseo histórico, el tren azul, que circula por diferentes sitios de interés o un bici-taxi a 1 euros los 3 minutos.
Por supuesto, una de las atracciones de la ciudad es visitar las fábricas de cerámica. Las más famosas por su antigüedad es la fábrica Royal Delft y Delft Pottery De Delftse Pauw.
Caminar por el centro medieval de Delft es encantador, especialmente visitar la plaza principal, una de las más bonitas de Holanda, bordeada por el Ayuntamiento y la Iglesia Nueva.
La Iglesia Nueva es una basílica de estilo gótico en forma de cruz donde está enterrado Guillermo de Orange, conocido como el príncipe de Delft, célebre personaje de la monarquía holandesa que residió y murió dramáticamente.
Lo mejor que mejor se puede hacer en Delft es pasear, disfrutar de su gran ambiente, pasear por los canales e incluso navegar por ellos. De entre lo más destacable que hacer en Delft es visitar sus dos iglesias, la nuevay la vieja, el singular ayuntamiento y la Grote Markt donde se encuentra este último.
A pesar de que su nombre significa "iglesia nueva", este templo data de 1496. Sube a la torre para ver Róterdam a lo lejos, La Haya y, en días despejados, hastaÁmsterdam.
La "iglesia vieja" de Delft se construyó en 1250, pero se le dio un toque gótico dos siglos después. Es el lugar donde descansan la mayoría de los personajes ilustres de Delft, incluido el famoso pintor Jan Vermeer.
El exterior del "Stadhuis" es simplemente magnífico, pero no dejes de visitar su interior para disfrutar de las estancias bellamente decoradas, desde la galería Orange a la Cámara del Consejo.
El Canal Viejo cruza la ciudad de norte a sur y es perfecto para dar un paseo en bici disfrutando de sus pintorescos edificios un día soleado. No te pierdas el Begijnhof y la "iglesia escondida".
Detrás del Ayuntamiento se halla De Waag, la Casa de Pesaje que tenían las ciudades queseras holandesas. También data del siglo XVII.
En el siglo XVII, Delft tenía 32 fábricas de porcelana, pero Koninklijke Porceleyne Fles es la única superviviente.
La cerámica azul de Delft es célebre en todo el mundo y sigue pintándose a mano como marca la tradición. Royal Delft o De Koninklijke Porceleyne Fles fue fundada en 1653 y es la única fábrica de cerámica azul de Deflt que queda en funcionamiento.
¿Quieres continuar con tu relajado paseo? Dirígete hacia la zona oriental del casco antiguo y encontrarás la hermosa Puerta del Este en el cruce de varios canales.
una de las más conocidas es la Royal Delft.